Sábado, 10 Marzo, 2007
De los casi dos millones de alevines que se soltarán durante este año, se ha recogido una muestra genética de los peces reproductores. Una vez que los salmones regresen a los ríos tras finalizar su proceso de crecimiento, se volverá a realizar un chequeo genético a los peces del río para verificar si éstos proceden de la repoblación o bien de la reproducción natural, comprobando si sus genes coinciden con los de los alevines soltados.
Se trata, según Celestino Pérez, de un sistema pionero de medición de la eficacia, ya que hasta ahora el control de los peces provenientes de las repoblaciones se hacía visualmente.