Los productores de acuicultura continental de Galicia aseguran que la entrada en vigor, el pasado 19 de diciembre, de la nueva Lei de Augas de Galicia permitirá revertir un cobro "excesivo" del canon de saneamiento de las instalaciones de acuicultura continental "que conlleva pérdidas de competitividad frente a otras comunidades autónomas y demás países productores de trucha".
El sector considera que el cambio supone para las plantas de producción de Galicia una reducción de la carga económica que, si no se hubiera realizado por la entrada en vigor del nuevo decreto, podría significar un grave problema para las empresas. La situación, a juicio de Susana Portela, gerente de la Asociación de Piscifactorías de Truchas de Galicia (Atrugal), era "insostenible". Con el nuevo canon -que tendrá efectos retroactivos para los años 2006, 2007 y 2008- "la cuota ha bajado, pero sigue significando un problema para algunas empresas gallegas", explica Portela, debido a que los niveles de competitividad siguen estando afectados al comparar la situación con otras comunidades autónomas donde el valor del canon es menor o no es aplicable a las instalaciones de acuicultura continental.
La tasa de saneamiento se estableció en Galicia a raíz de la creación de la administración hidráulica Galicia Costa con dos objetivos: uno ambiental, relacionado con la reducción, mediante penalización, de la contaminación y el consumo del agua, y otro financiero, ligado a la generación de ingresos para los planes y obras de saneamiento y depuración de Galicia.
El canon de saneamiento se incrementó notablemente desde 2003 y conducía, según los empresarios del sector acuícola, a la inviabilidad del sector.