La Asociación Española de Productores de Acuicultura Continental, ESACUA, y la Organización de Productores de Acuicultura Continental, OPAC, han mantenido una reunión en el día de hoy con D. Carlos Domínguez Díaz y D. Ignacio Escobar Guerrero, Secretario de Pesca y Director General de Recursos Pesqueros y Acuicultura, respectivamente, del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, en la que han analizado la situación de la acuicultura continental. Entre los temas que se han puesto sobre la mesa se encuentran la recuperación de la producción - tras las caídas de los últimos años -, el aumento de los puestos de trabajo y la catalogación de la trucha arco iris como especie exótica invasora, una de las cuestiones que más preocupa al sector por la complicada situación en la que quedaría si esta medida se pusiera en marcha.
Comunicación fluida con el Ministerio
Ambas asociaciones, que representan de manera conjunta más de un 80% de la producción del sector en España, consideran "de vital importancia" mantener estos encuentros con la administración para abordar la situación que está viviendo la acuicultura continental y en concreto el cultivo de trucha, que en los últimos años ha perdido la posición de liderazgo que mantenía en España. De hecho, el Secretario de Pesca y el Director General de Recursos Pesqueros y Acuicultura han mostrado su interés por el sector, abriendo la puerta a futuras nuevas conversaciones.
Según Luz Arregui, Presidente de ESACUA y Carlos San Miguel, Presidente de OPAC, "la Secretaría General de Pesca es consciente del momento en el que nos encontramos y ha sido muy receptivo en tratar el futuro de la acuicultura continental. Para nosotros estas reuniones con la administración son muy importantes por la delicada situación a la que nos enfrentamos, pero estamos contentos por la respuesta recibida".
Algunos de los temas que se han tratado han sido:
• Inclusión de la trucha en el listado de especies exóticas invasoras: según el Real Decreto 1628/2011, de 14 de noviembre, lo que supone la prohibición de la introducción de la trucha arco iris en el medio natural, impidiendo así los planes de repoblación de muchas Comunidades Autónomas y la actividad económica de muchas empresas dedicadas al cultivo para pesca deportiva.
• Recuperación de la producción: en los últimos años la trucha ha perdido en torno al 50% de su producción, con la consiguiente pérdida de puestos de trabajo. España es el único país europeo con un descenso tan significativo.