Bienestar animal en acuicultura: la importancia de la temperatura a la hora de calcular el período máximo de ayuno previo al sacrificio

Lunes, 17 Julio, 2017
  • XX ForoAcui se celebrará los días 10 y 11 de octubre de 2017, en el Hotel Eurostars Isla de La Toja (O Grove, Pontevedra). Una de las cinco mesas de trabajo en las que se tradicionalmente se estructura el foro se dedicará al bienestar animal en acuicultura  
  • Morris Villarroel, de la UPM, nos hablará sobre uno de los aspectos, si bien poco conocido, sí especialmente relevante tanto desde el punto de vista del bienestar animal como de la calidad del producto final: el ayuno antes del sacrificio
  •  Villarroel, junto a otros investigadores, han estudiado un aspecto que actualmente no se tiene en cuenta a la hora de determinar el período máximo de ayuno: la temperatura del agua. Expondrá algunos de los principales resultados de estos trabajos que se han publicado en varios artículos en ‘Aquaculture’

 
XX ForoAcui congregará los días 10 y 11 de octubre, en el Hotel Eurostars Isla de La Toja (O Grove, Pontevedra), al colectivo investigador, empresarial, administraciones y estudiantes vinculados al ámbito pesquero y acuícola para analizar, debatir y reflexionar sobre los recursos marinos y la acuicultura, así como contribuir a la transferencia de conocimientos.

En esta edición, una de las cinco mesas en las que tradicionalmente se estructura el foro se dedicará al “Bienestar animal en acuicultura”, una cuestión que, a medida que la actividad acuícola se ha ido incrementado, ha ido ganando cada vez mayor protagonismo y que, actualmente, está siendo foco de una intensa atención en distintos ámbitos: el de la producción, el de los científicos y el de los responsables políticos. Siendo además, un aspecto que preocupa cada vez más al consumidor.

Entre los ponentes de esta mesa, contaremos con Morris Villarroel, profesor titular del Departamento de Producción Agraria de la Escuela Técnica Superior de Ingeniería Agronómica, Alimentaria y de Biosistemas de la Universidad Politécnica de Madrid, con dilatada y contrastada experiencia en bienestar animal y que recientemente ha formado parte de la elaboración de la “Norma UNE 173300 Piscicultura. Guía de prácticas correctas para el sacrificio”, referente en esta materia en Europa.

La importancia del bienestar animal a día de hoy no se discute y, más allá de lo ético, es un aspecto clave en la supervivencia y rentabilidad de las empresas puesto que, entre otros aspectos, afecta a elementos clave en la cría de peces, como son salud de los animales, su crecimiento o la calidad final del producto.

Como nos explica Morris Villarroel, y si bien hay una legislación extensa e importante en cuanto a bienestar animal en animales vertebrados que se crían para comer, en la que se incluirían los peces, “la imposibilidad de aplicar muchas de las directrices de la ganadería terrestre a la ganadería acuática, y la  falta de datos científicos referidos al bienestar de los peces, ha llevado a que a día de hoy en la UE se esté trabajando en la elaboración de unos reglamentos específicos con los avales científicos suficientes para estos animales en cada una de sus fases: desde el bienestar en la granja al sacrificio, pasando por el transporte o la duración máxima de ayuno previo al sacrificio para la comercialización”.

Y es precisamente sobre el ayuno anterior al sacrificio sobre lo que Morris Villarroel  disertará en el Foro con la ponencia “Bienestar en peces: el ayuno antes del sacrificio y la calidad del producto”.

Villarroel comenzará introduciendo el tema destacando los aspectos generales de por qué es necesario proceder al ayuno en los peces antes del sacrificio, y que, como señala, tiene mucho que ver con la facilidad en el manejo, con un  menor desperdicio del pienso o con la reducción de la posibilidad de contaminación en la manipulación  durante el proceso de despiece.  Una vez argumentada la necesidad de ese ayuno, la pregunta es ¿durante cuánto tiempo?.  “Esto no está legislado”, recuerda el profesor de la Universidad Politécnica de Madrid, y lo que pretende la EFSA y otros grupos de interés es, añade, “establecer un límite máximo avalado por la ciencia”.

A día de hoy, en las piscifactorías este periodo de ayuno varía entre 1 y 5 días, pero ya  hay voces que señalan que el límite máximo debería establecerse en las 48 horas, en las 72 horas o los tres días (que baraja la EFSA). Periodos para los que, como destaca Morris Villarroel “no se ha tenido en cuenta la temperatura del agua en la que se encuentra el pez, ya que no es lo mismo un ayuno de una trucha, por ejemplo, si la temperatura del agua es de 20 ºC, que si es de 10ºC, puesto que el nivel metabólico del pez varía de una situación a otra”.

Es por esta razón que Villarroel, junto a Fernando Torrent, de la Escuela de Montes y Forestales, y Jesús de la Fuente y su equipo de la Facultad de Veterinaria de la UPM, decidieron trabajar sobre esta idea de incluir grados de temperatura/días de ayuno en el ámbito del bienestar animal, asociándolo también a la calidad del producto final.

Los resultados de los trabajos que han realizado, en este caso en trucha, y que Morris Villarroel expondrá en XX ForoAcui, han sido publicados recientemente, y en distintos artículos, en una de las revistas de mayor impacto en el ámbito de la acuicultura: ‘Aquaculture’. Avanzamos que los investigadores han determinado un ratio de grados/días que consideran el más adecuado desde el punto de vista del bienestar animal y, por ende, de la calidad del producto, y es que, a partir de que se supera ese ratio,  se ha comprobado que el pez comienza a resentirse.