Aprueban un plan de acción internacional contra la sobreexplotación del atún

Lunes, 29 Enero, 2007

El plan de acción se dedicará a mejorar la coordinación y el intercambio de datos entre los cinco organismos regionales encargados de la conservación del atún (RFMO), cuyas jurisdicciones abarcan casi todos los mares del mundo.

La creación de un programa armonizado para la supervisión del comercio del atún, una documentación compartida de las capturas y un etiquetado electrónico que permita el seguimiento de los ejemplares, o más transparencia para fijar las cuotas pesqueras, son algunas de las resoluciones más importantes.

Como se había adelantado este jueves, las RFMO acordaron crear un sistema de inspección internacional en alta mar y establecer sanciones para luchar contra la pesca ilegal.

Se pondrá además en marcha un sistema unificado para evaluar la efectividad de los propios organismos en su lucha contra las irregularidades del sector, como propusieron Japón, Australia y Estados Unidos.

Igualmente, se apostó por aumentar los recursos para asesorar a los países costeros con pocos medios sobre cómo combatir la pesca ilegal.

En la reunión participaron cerca de 300 personas provenientes de países como EEUU, España y Japón, así como un observador de la Organización para la Agricultura y la Alimentación de Naciones Unidas (FAO) y no estaba previsto debatir la reducción de las capturas mundiales de atún ni el establecimiento de nuevas cuotas.

La próxima cumbre se celebrará en 2009 y la Unión Europea (UE) ya ha mostrado su interés en acoger la conferencia.

Hasta entonces, los RFMO tienen previsto organizar nuevos encuentros, la siguiente a principios del 2008, para evaluar las acciones puestas en marcha durante este año y establecer reuniones de trabajo con vistas a una lista común en la que se distingan las embarcaciones ilegales de las registradas.

Especies como el atún rojo y el atún del Atlántico están actualmente sometidos a una pesca excesiva debido a la fuerte demanda a nivel mundial.

El atún rojo es una especie muy apreciada en Japón para elaborar platos típicos como el sushi y el sashimi, mientras que en Europa y Estados Unidos se ha disparado la demanda por sus propiedades saludables.