ACUICULTURA - ESPAÑA: Pladimega decide que cada bateeiro comercialice mejillón 'libremente'

Jueves, 4 Diciembre, 2008

El proyecto de la central de ventas de mejillón puede desaparecer en los próximas días si la asamblea de la organización, que está celebrando reuniones en Vilagarcía de Arousa (Pontevedra), aprueba la propuesta de sus dirigentes de interrumpir su actividad hasta la próxima primavera.

La sucesión de sabotajes en mar y en tierra, el incumplimiento de los compromisos en el reparto de ventas que atribuyen a la Federación Arousa Norte y el nerviosismo de algunas de las 26 asociaciones integradas en la plataforma y que temen perder la campaña de Navidad, llevaron a los dirigentes de los mejilloneros a valorar la oportunidad de, cuando menos, poner "un paréntesis" al proyecto.

La plataforma, conformada a inicios de agosto, representa a un 70% de los bateeiros gallegos y, a través de sus asociaciones, controla la producción de más de 2.000 bateas -de las 3.300 existentes en la comunidad-.

Los representantes de Pladimega decidirán el próximo año si reimpulsan la plataforma intentando evitar los errores que ahora provocaron su "fracaso".

Según aseguró el portavoz de la organización, Julián García, los principales errores en esta ocasión fueron intentar subir los precios del mejillón sin la unidad previa del sector extractivo y no haber sabido explicar las ventajas que, a su juicio, habría tenido que aglutinar a todas las asociaciones mejilloneras.

La voluntad de Pladimega es dejar que sus miembros puedan vender libremente y al precio que consideren oportuno su recurso, una circunstancia que, según sus responsables, provocará previsiblemente una "nueva" e "importante caída" en la cotización del mejillón. Esta decisión se produce en pleno inicio de la campaña navideña de los bateeiros, que comercializan en esta época del año un 30% del molusco bivalvo que cultivan.

Consecuencias

Los representantes de Pladimega aseguran que la venta individual del mejillón provocará una "importante caída" en su cotización.

El incendio de una grúa el pasado viernes en A Illa de Arousa (Pontevedra), y el corte de las cuerdas de dos bateas en O Grove (Pontevedra) el miércoles fueron los dos casos más recientes de una serie de sabotajes detectados en noviembre. Antes, esta situación había afectado a sendos productores de Rianxo (A Coruña), A Pobra do Caramiñal (A Coruña) y Vilanova de Arousa (Pontevedra).

Pese a que Pladimega condenó los ataques y las manifestaciones violentas, ninguno de los bateeiros afectados por estos sabotajes estaba vinculado a alguna de las asociaciones que integran la central de ventas de mejillón, cuya constitución oficial no llegó a producirse al haberse retrasado la redacción de sus estatutos.