Ortega García, Aurelio

Viernes, 23 Septiembre, 2016

Tras toda una vida volcada en la investigación en acuicultura, acaba de ocupar la jefatura del Área de Acuicultura del IEO. ¿Qué supone para usted esta nueva etapa?

Un reto importante: la posibilidad de contactar más directamente con todos mis compañeros del IEO y seguir de cerca sus investigaciones, aportando mi experiencia sobre aspectos que se vislumbran vitales en los próximos años como la modernización de las plantas de cultivo y el enfoque de la investigación en acuicultura en el IEO.  Debemos realizar una investigación de calidad que nos permita posicionarnos mejor en la I+D española sin dejar de lado la investigación más aplicada y las colaboraciones con empresas, que son muy importantes y que van a serlo aún más en los años venideros.

¿Qué retos afronta en su nuevo cargo?

Es muy importante que modernicemos nuestras instalaciones de cultivo para adecuarlas a las demandas de investigación actuales y que fomentemos la colaboración entre los distintos investigadores para formar equipos multidisciplinares -no solo dentro del área de acuicultura- que sean capaces de responder a las preguntas que nos llegan desde Europa y desde nuestras propias empresas. Además, tras una etapa en la que además de recortes y pérdida de personal, nos encontramos con importantes problemas de gestión que impiden que seamos todo lo eficaces que pudiéramos.

Junto a Fernando de la Gándara, ha sido uno de los padres de la domesticación del atún rojo en Europa. Tras 10 años de investigaciones, el IEO acaba de conseguir, por primera vez a escala mundial, cerrar el ciclo biológico de esta especie amenazada. ¿Se siente como si hubiera ganado una medalla de oro en los Juegos Olímpicos?

Me siento -nos sentimos porque creo que también es el parecer de Fernando- como corredores de fondo a los que aún nos queda un buen trecho por recorrer, pero que vamos cubriendo las etapas a un buen ritmo, incluso diría que superior al previsto.

Con este logro, ¿se podrá aliviar la presión pesquera de la especie a medio plazo?

No es éste nuestro principal objetivo, y creo que haríamos bien en diferenciar ambas actividades. A la piscicultura nunca le ha interesado competir con la pesca y tampoco en este caso, en el que el objetivo seguramente sea producir atunes a lo largo de todo el año, con un peso muy inferior al de las capturas de la pesca y quizás con un marchamo de mayor bioseguridad alimentaria. Además, afortunadamente las poblaciones de atún se están recuperando y así lo dicen todos los indicadores, con lo que si seguimos haciendo las cosas bien, las cuotas deberían aumentar en los próximos años.

¿Cuándo podremos ver en las pescaderías atún rojo nacido en cautividad?

Bueno, en Murcia ya se han vendido los primeros atunes nacidos en cautividad, pero para que la actividad sea rentable aun hay que mejorar bastantes cosas. No creo que en menos de 6-8 años podamos ver atún rojo del Atlántico nacido en cautividad de un modo cotidiano en el mercado.

¿Cuáles han sido las principales dificultades del proceso de domesticación del atún rojo hasta alcanzar este gran hito?

Todo ha ido llegando con gran esfuerzo, pero el manejo de alevines ha sido, tal vez, especialmente dificultoso. Y, actualmente, nuestras principales preocupaciones son la mejora de la calidad de los alevines producidos y la disminución de la elevada mortalidad en los dos o tres primeros meses de engorde.

En el IEO se acaba de inaugurar la Infraestructura para el Control de la Reproducción del Atún Rojo. ¿Qué avances esperan obtener con esta instalación pionera en Europa?

La aclimatación de los reproductores a tanques en tierra y el control de la reproducción son nuestros primeros objetivos, de tal modo que podamos obtener huevos fecundados de atún de calidad y durante una estación reproductiva más larga.

Además de la domesticación del atún rojo, ¿qué otras líneas de investigación en acuicultura son prioritarias para el IEO?

Hay varias líneas, entre ellas la mejora genética, la lucha contra enfermedades, requerimientos nutricionales de nuevas especies, las investigaciones en bioseguridad alimentaria, los cultivos multitróficos,  así como de micro y macroalgas, entre otras. Y en cuanto a las  especies no consolidadas, el pulpo, la seriola y la cherna son algunas de las que actualmente centran nuestro interés.

La sostenibilidad ambiental tiene un rol destacado en la investigación acuícola. ¿Cómo se trabaja desde su área para avanzar en la lucha contra el cambio climático?

Estamos inmersos en un proyecto europeo, CERES, que trata sobre este tema, y va a ser desde luego uno de los topics más recurrentes en los próximos años. Si no somos capaces de pararlo, al menos tenemos que estar preparados para conocer sus efectos e intentar mitigarlos en la medida de lo posible.

¿Cómo participa el IEO en proyectos de transferencia y asesoramiento a empresas del sector?

Desarrollamos varios proyectos con empresas, y es nuestra intención incrementar esta colaboración en el futuro, fundamentalmente mediante proyectos de investigación aplicada y trasferencia de conocimientos y tecnología.

¿Cómo augura el estado de la investigación en acuicultura en los próximos años?

Creo que la investigación girará en torno a los temas anteriormente mencionados, con una importancia creciente de su interacción con el medio ambiente, la acuicultura offshore, los cultivos multitróficos y todo lo relacionado con bioseguridad alimentaria, trazabilidad y las relaciones entre nutrición, medicina y producción acuícola. Y nuestro reto es saber posicionarnos en estos campos.

TEST RAPIDO

¿Mar, río, playa o montaña? Montaña.

Un lugar para perderse o encontrarse. Cualquiera sin cobertura.

Su plato favorito. Gambas rojas a la plancha y, por supuesto, atún rojo.

Un truco en la cocina. No molestar.

Un personaje público al que invitaría a comer. Obama.

Su libro o película favorita. El padrino.

¿Vino o cerveza? Depende de la estación. Cerveza en verano.

¿Viaje de placer o aventura? Aventura.

Miscelánea: 

Aurelio Ortega García (Cartagena, 1962) es Jefe del Área de Acuicultura del IEO desde junio de 2016. Doctor en Biología por la Universidad de Murcia, posee mas de 30 años de experiencia en acuicultura. Tras una breve experiencia como alumno en prácticas y becario en el IEO y la CCAA de la Región de Murcia, comenzó a trabajar en 1987 en un criadero de dorada y lubina de la empresa INDAPEX en Carboneras. En 1989 fue contratado por la Consellería de Pesca de la Xunta de Galicia, donde posteriormente gano su plaza de funcionario. Trabajó en el centro de Experimentación en Acuicultura de Couso (Ribeira) ente 1989 y 1998, donde participó y coordinó diversos proyectos de investigación sobre cultivos auxiliares y cultivo de rodaballo, besugo y salmónidos en agua de mar. Entre 1998 y 2002 ejerció de profesor de Enseñanza Secundaria en el IES Manuel Tárraga Escribano en San Pedro del Pinatar (Murcia), donde impartió los ciclos formativos de Producción Acuícola y operaciones de Cultivo Acuícola. A partir de 2002 desarrolla su labor en la Planta de Cultivos Marinos de Mazarrón del IEO. Comenzó trabajando con lenguado, aunque desde hace diez años se dedica al cultivo de escómbridos, bonito atlántico, y fundamentalmente atún rojo.  Ha organizado y participado en numerosos Congresos y reuniones científicas y es autor o coautor de numerosas publicaciones en libros y revistas científicas.